Reproducción de árboles frutales por acodo

La reproducción por acodo es un método asexual

La reproducción por acodo es un método asexual para propagar un árbol frutal a partir de uno existente. Es una forma eficaz de producir árboles jóvenes con las características de la planta madre, es una técnica que cada día está siendo más usada por cultivadores profesionales y aficionados.

Plantar una semilla lleva mucho tiempo para producir otro árbol frutal, la reproducción por acodo te permite obtener tu árbol favorito de una manera más rápida, manteniéndose el color, el tamaño, la forma y el sabor de la fruta de la planta original.

El acodo aéreo tiene una alta tasa de éxito porque permite que la nueva planta desarrolle raíces mientras aún está unida a la planta madre. A este método también se le conoce con el nombre de propagación por capas de aire.

La reproducción por acodo es un proceso simple, a menudo ocurre de forma natural cuando una rama baja o un tallo toca el suelo y echa raíces. Este es un procedimiento seguro de realizar porque no daña la planta original, ya que no se quita el material donante hasta que haya producido raíces.

La colocación de capas de aire consiste en eliminar una pequeña sección de corteza. Eso interrumpe el flujo de la savia del árbol, que luego estimula las hormonas vegetales responsables del crecimiento de las raíces.

Cómo reproducir árboles frutales por acodo

Para realizar una buena reproducción de árboles frutales por acodo se necesitan algunos materiales básicos: navaja, hilo, tijera de podar, musgo o algún sustrato para enraizar y una bolsa de plástico, también puedes usar un envase plástico o los tapones especiales para realizar capas de aire. Además, es importante seguir una serie de pasos, los cuales te describiremos a continuación:

  1. Selecciona una rama pequeña del árbol frutal que deseas utilizar para crear un árbol nuevo, idealmente con un diámetro de 1 a 2 cm.
  2. Realiza un corte poco profundo debajo de un nodo de la hoja para retirar un anillo completo de corteza.
  3. Raspa ligeramente la capa de cambium. Esto evitará la reconexión de los tejidos que fluyen de la savia.
  4. Aplica alguna hormona de enraizamiento en la madera expuesta para acelerar el proceso de enraizamiento (opcional).
  5. Aplica en el área expuesta musgo, alguna mezcla de tierra, compost o abono de enraizamiento, previamente humedecido.
  6. Envuelve todo con una bolsa plástica negra o recipiente plástico. Cierra bien con cinta adhesiva.
  7. Mantén la humedad y evita la luz solar en esa área para promover el proceso de enraizamiento.
  8. El tiempo necesario para desarrollar raíces varía según la especie de árbol frutal y la época del año. Podría llevar tan solo seis semanas o varios meses.
  9. Luego de seis semanas revisa si ya creció el sistema de raíces, de no ser así cubre bien y espera más tiempo.
  10. Una vez que el enraizamiento se haya completado, el siguiente paso es cortar la rama del árbol principal justo debajo de las raíces ya desarrolladas y colocarla en una maceta.
  11. Ya cuando el nuevo árbol esté plantado en su lugar de crecimiento, simplemente observa su forma y quita algunas hojas si el árbol no está equilibrado, aplica los cuidados necesarios para el desarrollo exitoso del árbol frutal.